miércoles, 23 de noviembre de 2011

“Postatus” viatoris

Solo dos veces quise tener Internet en el celular. La primera fue una vez que íbamos a votar a un colegio que quedaba en la calle Venancio Flores y mi hermano pudo averiguar al instante (y mientras caminábamos) quién era ese tal don Venancio Flores.

La segunda (y acá viene el asunto) fue cuando vi una entrada de Enrique García-Máiquez colgada directamente al blog desde la AP-4 Sevilla-Cádiz. “Postear” desde la ruta es un acto con un simbolismo muy poderoso. Podría ser un ritual, porque es poner en símbolo aquello que hacemos los "blogueros" a diario: “postear” desde el camino, desde la vida.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Viajes musicales al Uruguay (IV)

[E-mail a mi papá] Hola, te mando esta canción que habla de carreras de bicicletas. Es de Uruguay. El autor es Fernando Cabrera y esta versión es de un disco que hicieron con otro famoso músico que se llama Eduardo Mateo.

Para escuchar, clic acá:


Acomodá el volumen y la letra es la que sigue:

El viento en la cara

Pasacalles de largada,
los boliches de Garzón
hirviendo en presagios y apuestas.
Caramañolas, morral de la fiereza.
Corazones que explotan de tanto bombear.
A codazos y escupidas se juegan la cuerda,
se corre la curva, se mueve la esquina.
A codazos y escupidas se mueve la esquina.

Pasacalles de largada,
los boliches de Garzón
hirviendo en presagios y apuestas.
Caramañolas, morral de la fiereza.
Corazones que explotan de tanto bombear.
Patinazo y rodada, repecho y bajada.
Se angosta la curva, se salta la vía.
Patinazo y rodada, se salta la vía.

Ajustando un destino de tubo y piñón,
la Doble Cerrillos, con lluvia y caída
de malla de honor.
Apretando la moto entre las piernas,
las manos llenas de palmadas y
ruedas auxiliares.

Club Ciclista Fenix, Maroñas, Policial,
General Hornos.

Pasacalles de largada,
los boliches de Garzón
hirviendo en presagios y apuestas.
Caramañolas, morral de la fiereza.
Corazones que explotan de tanto bombear…

lunes, 14 de noviembre de 2011

Vieja canción de libertad, nueva canción de cuna

Estaba pasada de cansancio y no se tranquilizaba. La levanté a upa y señaló que quería ir al living. Fuimos. Y luego más allá hasta una ventana que daba a la calle vacía. Entonces ataqué con “Only our rivers run free”, silbada bien fuerte. Me miró. Me llamó la atención cómo me miró. Y al instante se relajó. Y luego bostezó un poco. Después empezó a pedir la teta. La dejé con su mamá y se fue durmiendo.

Only our rivers run free” es una canción irlandesa compuesta por Michael McConnell. Es triste y está relacionada con la lucha por la independencia. Parece ser buena como canción de cuna. Yo la escuché por primera vez hace mucho, en una versión que ya no tengo más (ni creo poder encontrar). En su defecto, pueden elegir una de estas versiones (aunque hay muchas más):

Christy Moore (goear): clic.
Christy Moore (grooveshark): clic.
Planxty: clic.
The Wolfe Tones: clic.

Only our rivers run free (Solo nuestros ríos corren libres)

When apples still grow in November, / Cuando las manzanas aún crezcan en noviembre,
when blossoms still bloom from each tree, / cuando las flores todavía florezcan en cada árbol,
when leaves are still green in December, / cuando las hojas estén todavía verdes en diciembre,
it's then that our land will be free. / es entonces que nuestra tierra sera libre.
I wander her hills and her valleys / Contemplo sus colinas y sus valles
and still through my sorrow I see / y a través de mi tristeza puedo ver
a land that has never known freedom / una tierra que nunca conoció la libertad
and only her rivers run free / y solo sus ríos corren libres

I drink to the death of her manhood / Brindo por los hombres que murieron.
Those men who'd rather have died / Esos hombres que hubieran preferido morir
than to live in the cold chains of bondage / antes que vivir en las frías cadenas de la esclavitud
to bring back their rights were denied. / para traer sus derechos a donde habían sido negados.
Oh! Where are you now when we need you? / ¡Oh! ¿Dónde están ahora que los necesitamos?
What burns where the flame used to be? / ¿Qué es lo que arde donde la solía estar la llama?
¿Are ye gone like the snows of last winter / ¿Se fueron como las nieves del ultimo invierno
and will only our rivers run free? / y solo nuestros ríos correrán libres?

How sweet is life, but we're crying. / Cuán dulce es la vida, pero nosotros lloramos.
How mellow the wine, but it's dry. / Cuán añejo el vino, pero está seco.
How fragrant the rose, but it's dying. / Cuán fragante la rosa, pero está muriendo.
How gentle the breeze, but it sighs. / Cuán suave la brisa, pero suspira.
What good is in youth when it's aging? / ¿Qué hay de bueno en la juventud cuando está envejeciendo?
What joy is in eyes that can't see? / ¿Qué alegría en ojos que no pueden ver?
When there's sorrow in sunshine and flowers / Cuando hay pena en la luz del sol y en las flores
and still only our rivers run free / y todavía solo nuestros ríos corren libres.

lunes, 7 de noviembre de 2011

¿A dónde iremos a parar? (II)

El misterio de “una vida dentro de otra” es tan enorme y tan devastador para la mente del hombre actual, que no lo puede resistir. Huye de él como un niño de los fantasmas.

El que domina todo, el dueño del mundo, no sabe qué hacer cuando se encuentra con una persona dentro de otra. Cuando, como a veces, el que la lleva no la quiere, o no la esperaba, o no la planeó. Y cuando, como siempre, el que está adentro no tiene nada que ver con eso y se prepara para vivir.

El hombre es dueño del mundo. Pero no es dueño del hombre. Llegó al límite. Está ante el misterio. La vida pone juntas a dos personas en una unión íntima. Pero siguen siendo dos, siguen siendo uno y otro. Y como sucede cuando nace y crece el niño, los padres tampoco son en ese momento sus dueños.

Pero el hombre evita ese dilema. Se llena de palabras y justificativos. Y se convence a sí mismo de que hay un lugar en donde la realidad cambia. Que hay una escapatoria al misterio en un lugar de fantasía llamado las doce semanas. O el sistema nervioso. O quizás mañana sean trece. O la cantidad de células. O...

sábado, 5 de noviembre de 2011

Viajes musicales al Uruguay (III)

Le digo chau y se queda acongojada,
pero yo se que nos vemos en el final.
Le digo chau y sé queda esperanzada,
pues sabe que mi camino termina acá.


Los versos principales son geniales. Bien puede ser una despedida por la mañana con la esperanza del reencuentro por la noche. Porque “yo sé que nos vemos en el final”. Incluso cuando dice que “mi camino termina acá”. Porque no es algo que se detiene. Es el viaje, que empieza con el chau, que termina en el mismo lugar en donde empezó.

Pero la interpretación “metafísica” es irresistible. “Nos vemos en el final”… de esta vida. Y el “camino termina acá”. Porque en esta vida termina el camino, el estado de tránsito, el status viatoris. Terminará el tránsito y nos volveremos a encontrar.

Muy, muy en línea con “El tiempo está después”. Pero, ¡basta de cháchara! Hay muchos otros versos lindos. Disfruten otra magnífica canción de Fernando Cabrera, en esta versión de Mateo y Cabrera:




Al mismo tiempo

Al mismo tiempo que me pone una cadena,
ahuyenta el miedo que tranca mi libertad.
Se quedaría por siempre conmigo adentro,
pero sabe que no hay modo de echarse atrás.

Me dice cosas que me hacen creer en algo
y me retiene si quiero empezar a andar.
Le digo chau y se queda acongojada,
pero yo sé que nos vemos en el final.
Le digo chau y se queda esperanzada,
pues sabe que mi camino termina acá.

(repite lo anterior)

Al mismo tiempo que me pone una cadena,
ahuyenta el miedo que tranca mi libertad.
Se quedaría por siempre conmigo adentro,
pero sabe que no hay modo de echarse atrás.

Me dice cosas que me hacen creer en algo
y me retiene si quiero empezar a andar.
La vida dice que si, la vida dice que no…
Pero yo se que nos vemos en el final.
Su cara me lo negó, su cara me lo afirmó…
Pues sabe que mi camino termina acá.

La vida dice que si, la vida dice que no…
Pero yo se que nos vemos en el final.
Su cara me lo negó, su cara me lo afirmó…
Pues sabe que mi camino termina acá.

Le digo chau y se queda acongojada, / La vida dice…
pero yo se que nos vemos en el final.
Le digo chau y se queda esperanzada, / Su cara…
pues sabe que mi camino termina acá.

Al mismo tiempo que me pone una cadena…

martes, 1 de noviembre de 2011

¿A dónde iremos a parar? (I)

Ahí está una imagen del mapa que hizo una organización llamada "Center for reproductive rights", que cuenta con un lindo banner de una campaña de nombre tan repelente como "Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito" (lo corté). Por supuesto, los países "en rojo" son los que prohíben el aborto bajo casi todo concepto. ¡Aguante Irlanda, allá en el medio del "primer mundo"!

¡Qué curioso, el primer mundo es el último lugar en donde te tocará probablemente nacer!

La respuesta de “Los Miserables”

Octubre se fue con Los Miserables. Me gustó la novela. Repasé un poco las partes marcadas con lápiz y descubrí lo siguiente, bien al inicio: “¿Puede la naturaleza humana transformarse así completamente? Al hombre, creado bueno por Dios, ¿puede hacerlo malo el hombre? ¿Puede el destino modificar el alma completamente, y hacerla mala porque es malo el destino? ¿No hay en toda alma humana, no había en el alma de Jean Valjean en particular una primera chispa, un elemento divino, incorruptible en este mundo, inmortal en el otro, que el bien puede desarrollar, encender, purificar, hacer brillar esplendorosamente, y que el mal no puede nunca apagar del todo?”.
(Los miserables, Primera parte, Libro segundo, V)

Creo no equivocarme si digo que la respuesta a esa última pregunta es uno de los temas principales de la novela. Creo además que la respuesta a una pregunta así es casi una respuesta de fe. Mi respuesta es que sí. Como entiendo que también dijo Victor Hugo con su Jean Valjean.